¿Tienes ganas de hacer deporte y no te atreves a salir fuera de casa con la nieve? Te contamos algunas de las rutas más bonitas para hacer con raquetas de nieve, algunas de ellas perfectas para hacer en familia. ¡Recomendamos ir acompañados de guías profesionales! Fuente: https://www.desnivel.com/
Ibón de Piedrafita
El ibón de Piedrafita es una de las excursiones favoritas y más conocidas del Valle de Tena. Muy recomendable para aquellos que sólo disponen de unas horas para una excursión y quieren adentrarse en la alta montaña sin mucho riesgo.
El ibón de Piedrafita se sitúa a los pies de la canal de Cavacherizas, canal por donde discurre la ruta tradicional a Peña Telera desde el norte. El enclave es mágico la orografía rocosa tiene una personalidad muy especial. Se yerguen en el camino las formaciones calcáreas de la Corona del Mallo y Peña Telera.
Para iniciar el camino, hay que salir desde la plaza del pueblo de Piedrafita y seguir las indicaciones hasta el Parque Faunístico Lacuniacha. Pocos metros más adelante se encuentra un amplio aparcamiento donde dejar el coche. Sólo hay que seguir la pista, sin asfaltar y comenzar el camino entre un precioso bosque de pinos. Cuando la pista se vuelva casi llana, llegaremos al refugio de Las Planas. Cuando estemos perpendiculares al refugio, a nuestra izquierda se encuentra el canal que sirve de desagüe al ibón, que sin pérdida, nos llevará hasta él.
Ficha técnica
Punto de partida: Piedrafita de Jaca
Dificultad: Baja
Desnivel: 250 m hasta el ibón
Distancia: 7 km. Horario aproximado: 3h
Vuelta por el Balneario
El Balneario de Panticosa es uno de los destinos turísticos e históricos más apreciados del valle de Tena. Su historia se remonta a la época de los romanos, hoy en día el Balneario está declarado como Bien de Interés Turístico Nacional, con algunos edificios que aún conservan el aroma decimonónico y siempre rodeado de un entorno mágico.
El interés natural del Balneario es indiscutible, ya que es un lugar con un ecosistema único en el valle de Tena. Se trata de un circo de origen glaciar formado por rocas graníticas que fueron pulidas durante miles de años por el hielo.
Este singular paisaje granítico, único en el valle, está recubierto por espectaculares bosques de pino negro que forman una estampa preciosa, especialmente después de una copiosa nevada. Su fácil acceso, su altitud y la cantidad de servicios a nuestra disposición son los mejores motivos para lanzarse a hacer una visita con raquetas de nieve por el itinerario balizado en el bosque.
Ficha técnica
Desnivel: 100 metros en total
Distancia: 1,5 km
Dificultad: Baja. Ideal para iniciarse en rutas de alta montaña o ir con niños.
Punto de partida: Detrás del bar Arlequín.
Horario aproximado: De 1h 30 minutos a 2h
Circular a O Forato
Sobre la estación de esquí de Formigal se alza una de las señas de identidad del Valle: La Peña Foratata con su espléndida pared sur. Bajo ella se abre un amplio terreno para moverse con las raquetas o los esquís de montaña, saliendo desde la misma urbanización de Formigal, por suaves lomas salpicadas de algún que otro pino negro y bloques de piedra entre los cuales encontraremos alguno de andesita, como vestigios de la actividad volcánica que hubo en el pasado.
A su lado emerge un espolón calcáreo llamado O Forato ensombrecido por la silueta de su vecina Foratata. Junto a él hay pequeño jardín kárstico donde los pinos negros han encontrado su lugar preferido.
Esta ruta con raquetas de nieve consiste en dar la vuelta a esta isla calcárea, pasando por el cuello del Forato, desde donde tendremos la primera visión de la enorme masa del Ferraturas, pico limítrofe con nuestros vecinos del Valle d’Ossau y tendremos una grata sensación de estar adentrándonos en la alta montaña tensina.
Si queremos dejarnos impresionar por unas vistas espectaculares, podemos acercarnos al collado de La Fita, curiosamente es el nombre de nuestra querida perrita, donde las aguas se dividen hacia el valle de Aguas Limpias y podremos admirar a los gigantes tensinos de una sola mirada: Arriel, Palas, Balaitús, Frondiellas, Tebarray, Infiernos, Garmo Negro, Algas, y en sentido opuesto, la sugerente silueta del Anayet.
Tras la parada casi obligatoria en el collado de La Fita, seguimos nuestro recorrido circular, ahora en descenso, hacia los extensos llanos por donde discurre el barranco del Arrigal. Sin perder demasiada altura y sin separarnos de las pendientes que suben hacia O Forato iremos girando a la izquierda para llegar a la zona de las Bozosas. En este lugar volveremos a encontrarnos con la pared sur de la Foratata y con las preciosas vistas de la Sierra de Tendenara, bajo la cual se encuentra Panticosa. Ahora sólo nos queda elegir por qué loma descenderemos a la urbanización de Formigal, ya cercana y completamente a la vista.
Ficha técnica
Desnivel: 480 m.
Distancia: 6 km.
Horario aproximado: 3 a 4 h.
Dificultad: media.
Ibones de Ordicuso
Sobre la ladera oeste del Balneario de Panticosa se encuentra el Macizo de Argualas, donde se concentran unas cuantas cumbres de más de 3.000 metros, entre las cuales encontramos el Garmo Negro, el Algas, Argualas y los vecinos Picos del Infierno. Las características del terreno hacen que los aludes sean frecuentes. Esta circunstancia, unida a que es un lugar que recibe muchas visitas de montañeros en invierno por su rápido acceso, ha convertido a este lugar en un punto negro.
El recorrido que proponemos a continuación, aunque comparte la parte inferior con el sendero que sube al Garmo Negro, evita las zonas más conflictivas. Se trata de visitar uno de los ibones más bellos de la zona, un lugar mágico con unas vistas espectaculares, el ibón de las Ranas, o según los mapas, ibón de Ordicuso.
Partiendo del refugio Casa de Piedra, iremos a buscar el camino que cruza las pistas de esquí nórdico para dirigirnos hacia la fuente de La Laguna, donde mana permanentemente un agua a 22ºC. Desde la fuente parte el sendero que sube, mediante varias zetas y a la sombra de los pinos, hacia el Garmo Negro y demás cumbres del grupo del Argualas.
Después de entre 30 y 45 minutos, el bosque se irá abriendo a medida que llegamos a la Mallata Baja de Argualas y por fin, podremos ver los contrafuertes del Argualas y Peña Gabarda.
Es posible que se vean restos de avalanchas de grandes dimensiones en el fondo del circo, pero nosotros nos dirigiremos a nuestra izquierda (sur-suroeste), a la colina que se ve llena de pinos (a la derecha se va hacia el Garmo Negro). En cuanto nos acerquemos a esta ladera de la izquierda, subiremos en dirección sur por unas pendientes inclinadas, donde iremos encontrando más pinos negros. De vez en cuando veremos alguna marca de pintura, azul y blanca, en los troncos.
Cuando hayamos superado la primera pendiente (unos 30 minutos desde la Mallata Baja de Argualas), hacia la cota 2.050 m. nos dirigiremos con tendencia suroeste para, después de cruzar unas pequeñas lomas, llegar a los ibones de Ordicuso.
El paisaje es impresionante: Gabarda, Argualas, Garmo Negro, Pondiellos, Serrato, Xuans, Batanes, Baciás, Forátulas y debajo, el circo del Balneario.
El descenso lo podemos hacer por el mismo itinerario, o si no hay riesgo elevado de aludes, podemos dirigirnos hacia el oeste (O) y, tras descender las primeras palas, ir girando hacia el norte por el fondo del valle, siempre alejados de los contrafuertes que descienden del Argualas. De esta forma, llegaremos de nuevo a la Mallata Alta de Argualas y enlazaremos con la primera parte del recorrido que llega hasta el Balneario.
Ficha técnica
Desnivel: 450 m.
Distancia: 3 km (ida y vuelta).
Horario aprox.: 4 a 5 h (ida y vuelta).
Dificultad: Media-Difícil, según las condiciones de la nieve.
Material indispensable: Mapa, brújula, altímetro, comida, agua, ropa de abrigo.