Objetivo de la poda de invierno

El objetivo de la poda es regular la producción de la cepa que va a haber en ese año. Por esa razón, para llevar a cabo la poda se cuentan hasta las yemas que vas a dejar en cada planta. Estas yemas crecerán y te dejarán un número de racimos determinado, y contando los sarmientos que hay, por el número de yemas, considerando el número de racimos de cada yema, tendrás un cálculo aproximado de racimos que vas a recoger y, por tanto, la cantidad de producción de uva para ese año.

Las 5 recomendaciones para una buena poda en invierno de la vid

1ª Recomendación para la poda de invierno de la vid: Hay que estudiar bien los meses para hacer la poda de invierno

Está muy extendido que el período para llevar a cabo la poda de invierno de la vid está comprendido entre los meses de noviembre-diciembre hasta marzo. Es cierto que tiene sentido que en extensiones muy grandes de viñedo para podar, especialmente en aquellas plantaciones que se encuentran en zonas de clima más atemperado, se inicien las labores de poda en diciembre, puesto que es la mejor manera de asegurarse de llegar a marzo con todo el viñedo podado.

Sin embargo, en el caso de que tengas una extensión más pequeña y puedes trabajarla con menos antelación, sería recomendable que retrasases la poda todo lo que puedas. No sólo tiene que ver con la extensión, si no con la zona climática en la que te encuentres.

En nuestro caso, con las viñas incluso a más de 1.300 metros de altura, en plantaciones de alta montaña en el Pirineo, debemos retrasar la poda de invierno a marzo o incluso a finales de marzo. El motivo es que en cuanto llegan las primeras subidas de temperatura, ese atemperamiento de las plantas hace que vuelvan a activarse, que la savia vuelva a circular con normalidad después de la pasividad en la que quedan sumidas en invierno, cuando las plantas están en un reposo vegetativo.

Entonces, si volviera a haber una helada después de esos primeros calores, algo que puede suceder, esos primeros brotes se quemarían sin remedio. Así, con el retraso de la poda al máximo ayudamos a retrasar la activación de la planta y prevenimos en gran parte el efecto negativo de las heladas posteriores.

Recomendación para la poda de invierno de la vid: No lleves a cabo la poda con temperaturas frías

Si las temperaturas se mantienen en torno a los 0º esto no es bueno para podar la planta. El motivo es que con la poda se desproteje la parte cortada de la planta, por lo que el frío entrará en la planta y puede helar la yema cercana o las otras yemas más próximas, así como debilitaremos la vid. Sencillamente, hay que esperar a que las temperaturas sean superiores a los 4-5 grados centígrados para evitar este efecto adverso.

Recomendación para la poda de invierno de la vid: Practica la poda de respeto para proteger las yemas de la vid

La poda de respeto es la práctica de dejar bastante más madera en la rama por encima de la última yema que vayas a dejar. La razón es que con la poda, la madera por donde cortas se deseca y esa desecación entra hacia dentro del sarmiento y la planta. Si el corte que tú haces lo haces demasiado cerca de una yema que quieres que de fruto, lo que estás haciendo es que la sequedad entre hacia la yema.

Es una práctica en la poda que entra en conflicto con una tradición muy extendida de podar a ras de las yemas, por razones estéticas y para limpiar la mayor madera posible, lo que contradice la poda de respeto. Esta recomendación lo que dice es que hay que dejar partes altas de las ramas para que no entren los conos de desecación. Para eso tiene que haber sarmientos de madera que, aunque queden algo altos al principio, ya se irán rebajando con el paso de los años.

4ª Recomendación para la poda de invierno de la vid: Elige el tipo de poda dependiendo de la variedad de la uva

Hay muchos tipos distintos de formación en la poda: Guyot simple, guyot doble, royat simple, royat doble, cordón, cordón unilateral… El tipo de formación en la poda no tiene que ver con lo que más te guste estéticamente, si no que también le corresponde a una variedad concreta de uva de la vid. Según la variedad de uva que se vaya a plantar, hay que mirar cuál es el sistema de formación o conducción adecuado, o corres el riesgo de que la planta no produzca tanto como podría. Así, hay que elegir la formación en la poda apropiada para mejorar el rendimiento posterior de la planta.

5ª Recomendación para la poda de invierno de la vid: Hacer la poda de la uva en el momento adecuado del calendario lunar

Es un dicho popular que muchos conocemos, y que ha pasado de generación en generación, el de que la poda siempre hay que hacerla en luna menguante. El mito es cierto, puesto que el efecto de la luna descendente, asociada con la luna menguante, es el mejor momento para realizar la poda. ¿Por qué? La circulación de la savia en la planta, a pesar de que en invierno se encuentra en reposo vegetativo, depende de la influencia lunar, así en luna llena la savia se expande hacia los ápices o puntas de la vid, por lo que la planta estará siempre más activa y corres el riesgo de hacer que se hielen las yemas. La probabilidad desciende en luna menguante, cuando la savia estará más retraída hacia las raíces.

Os dejamos con un vídeo que hicimos sobre cómo y cuándo podamos las viñas.

https://www.youtube.com/watch?v=Kfe437u900c

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